POSE® (Usgi Medical, Inc., San Clemente, CA)
POSE: Primary Obesity Surgery Endoluminal, o Cirugía Primaria Endoluminal de la Obesidad, es una técnica no quirúrgica que permite reducir la capacidad del estómago por vía endoscópica (a través de la boca) y por tanto, menos invasiva y sin incisiones ni cicatrices externas.
El procedimiento endoscópico consiste en realizar pliegues en el estómago, y suturarlos de forma individual e independiente. Al realizar dichos pliegues se reduce la capacidad del estómago, se altera la motilidad y se enlentece el vaciado, provocando que el paciente presente mayor saciedad tras la ingesta de menor cantidad de alimento.
En el procedimiento se emplea un endoscopio flexible y un aparataje especialmente diseñado para ello, la plataforma IOP (Plataforma de operación sin incisión (fotos))
Se realiza bajo anestesia general, con intubación endotraqueal y con profilaxis antibiótica (dado que las suturas se realizan a través del espesor total de la pared gástrica), y con insuflación de CO2.
Después del procedimiento se quedará ingresado durante unas horas para control, siendo dado de alta tras comprobar que no existen complicaciones.
La técnica presenta ventajas sustanciales, pues al no ser necesaria la apertura del abdomen se reduce el dolor post-procedimiento, disminuye el riesgo de infección pues no existen heridas externas, contribuye al aspecto estético por ausencia de cicatrices visibles, la recuperación es más rápida y las estancias hospitalarias son más cortas o en régimen ambulatorio.
Tras el procedimiento se pueden presentar náuseas, distensión y dolor abdominal. Como principal incidencia de la intervención destaca el sangrado, que suele ser autolimitado por la misma presión de las suturas sobre el tejido.
Inmediatamente tras finalizar el procedimiento se le empezará a administrar tratamiento para reducir lo máximo posible dichas molestias, que mantendrá en los días siguientes tras el alta y que permitirá en la mayoría de los casos realizar una vida normal a los pocos días.
Esta técnica se recomienda especialmente a aquellos pacientes con IMC comprendidos entre 30 y 40 kg/m2, ó IMC superiores en los que se rechace o se contraindique la cirugía. Puede también ser realizada en los pacientes en los que el balón intragástrico no les haya funcionado.
No obstante, la mejor opción de cada técnica ha de ser valorada a nivel individual, considerando no sólo el peso, sino al paciente en su globalidad, teniendo en cuenta otros aspectos que puedan ayudar a tomar la decisión.
La pérdida de peso siempre dependerá de cada caso, y será determinante que el paciente haya adoptado a largo plazo cambios en su estilo de vida relacionados con la alimentación y el ejercicio.
Es imprescindible señalar que el proceso de pérdida de peso no finaliza con la realización de la técnica, sino que es fundamental complementar la técnica endoscópica con el cumplimiento de las medidas dietéticas estrictas, ejercicios y recomendaciones que le sean indicados.
Es por tanto muy dependiente de cada paciente y del grado de cumplimiento.